Felicidad

¿Qué es la felicidad? esa es quizás una de las preguntas más ambiguas que alguna vez el ser humano se ha planteado puesto que en realidad si sabemos lo qué es en sí, la pregunta que en su lugar debería plantearse es ¿Cómo obtengo felicidad? ¿Cómo se llega realmente a ese estado de alegría extrema y satisfacción que todos los hombres parecen perseguir? 

Es aquí que prefiero iniciar esta cuestión diciendo lo que creo personalmente que es la felicidad es en ese sentido que primero es necesario plantear que yo entiendo que la felicidad es un Estado de Emoción al cual los seres humanos llegamos como consecuencia de algo que ocurre en nuestra vida lo cual no tiene que ser necesariamente algo enorme o súper trascendental, lo cierto es que algunas personas encuentran su felicidad caminando en un parque y otras viendo un partido de fútbol, entre otros tantos ejemplos; pero la cuestión es esa la Felicidad es un Estado al cual llegamos de alguna forma pero como todo Estado esto es cambiante ya que es imposible mantenernos en el mismo lugar o con el mismo sentimiento, es así que es el continuo cambio lo que nos acerca y a la vez nos aleja de aquellos momentos en los cuales podemos sentir la felicidad.

En este punto creo es necesario resaltar que siento que en el desarrollo de nuestra sociedad moderna y todo lo que esto conlleva hace que la felicidad se este convirtiendo en un producto sobrevalorado, puesto que sin importar nuestras diferencias estamos viviendo una realidad en la cual muchas personas creen que la felicidad puede encerrarse en un frasco y venderse al mejor postor repitiendo el ciclo e imponiéndolo de tal manera que empieza a generar un sentido de necesidad en las personas ya que si no tienes el producto que te otorgara la felicidad ¿Cómo serás feliz?

Por lo tanto nos encontramos ante la disyuntiva principal de este problema ¿Cómo obtengo la felicidad? Está debe ser la pregunta mas difícil de responder puesto que su respuesta no es general sino más bien específica, con esto me refiero a que contrario a lo que se ha estado buscando implantar en los últimos años la felicidad no se puede conseguir con un método o de la misma forma sino más bien es algo completa y totalmente subjetivo, por lo que es como cualquier sentimiento que como personas podemos tener algo que se genera condicionado por un contexto y una forma única y singular de vivir.

Obviamente la respuesta más directa a todo lo anteriormente planteado es que si bien la felicidad es personal y subjetiva si se ve condicionada por un contexto el cual es general, sí bien esto puede ser cierto no lo es esencialmente puesto que lamentablemente el ser humano es capaz de adaptarse a todos los contextos en los que puede vivir, desde condiciones climáticas extremas hasta la más grande pobreza material, entonces podemos decir que si bien el contexto puede condicionar nuestra posibilidad de sentirnos felices ante determinados momentos, lo cierto es que el ser humano puede ser feliz e infeliz en cualquier circunstancias ya que aún teniéndolo todo el ser humano puede ser infeliz.

Al escribir todas estas líneas no pretendo intentar explicar el porqué somos o no felices, sino más bien intentar personalmente comprender porque en algunos momentos una persona puede ser el ser más feliz de la tierra para posteriormente ser tan infeliz, y tratando de responder esa cuestionante termino hundiéndome en toda esa palabrería que probablemente no tenga ningún sentido, no lo sé...

Muchas veces a lo largo de mi corta existencia he escuchado que las personas dicen que el objetivo de hacer algo es ser feliz o que es esa su meta en la vida, lo cual me genera una verdadera contradicción puesto que en cierto punto intentamos darle sentido a nuestra vida poniéndonos metas u objetivos que supuestamente nos harán felices y que lamentablemente en realidad no lo hacen,

Es así que a manera de conclusión de esta reflexión casi filosófica y quizás un poco absurda, siento que la felicidad no es algo genérico y a lo que podamos ponerle un método, siento que es algo tan personal que a veces es eso lo que nos hunde o nos genera conflicto al sentir que no podemos encontrarla, ya que el establecer una conexión con uno mismo y poder encontrar aquello que ansiamos es tan difícil
que realmente siento que si realmente pudiéramos hacerlo estaríamos en contacto con algo trascendental o incluso con Dios, lo cierto es que no tengo idea...



Comentarios

  1. Creo que la felicidad no es un fin un sí mismo; es un medio(un impulso) que nos permite estar en constante búsqueda de mejorar o "evolucionar" para no sólo adaptarnos sino también lograr destacarnos (viéndolo desde un punto de vista evolutivo), es entonces la felicidad una recompensa y a la vez un estímulo, que si estuviera presente de forma permanente ya no tendríamos motivos para cambiar nuestras conductas ni mejorar, y por lo tanto nos quedaríamos estancados, por eso creo que la felicidad no es un fin, porque no está presente de forma permanente, y si lo estuviera estaríamos condenados a quedarnos en lo estático y mediocre (sea en la vida personal, profesional o académica)

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    1. La verdad leyendo tu comentario unos días después le encuentro mucha lógica, aunque ciertamente creo que esa idea de la felicidad como un impulso también puede ser algo ambiguo, porque si nos sentimos felices para qué deberíamos mejorar? Creo que eso es algo interesante en qué pensar...
      Igualmente gracias por leer y comentar!

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